La atención en urgencias a pacientes con problemas de salud mental centra el último Beer for Science
La tertulia analizó los principales rasgos de estos usuarios y los casos de más frecuencia.
Foto de portada: La doctora Moreno Küstner es la responsable del Grupo Andaluz de Investigación Psicosocial (GAP) de la Universidad de Málaga. /UCIENCIA
Las doctoras Berta Moreno Küstner, investigadora del Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico; y Cristobalina Guillén Benítez, de la Unidad Clínica del Dispositivo de Cuidados Críticos y Urgencias del Distrito Sanitario Málaga-Coín-Guadalhorce, fueron las encargadas de conducir la última tertulia Beer for Science celebrada ayer en la cervecería Molly Malone’s Teatinos.
La cita, titulada ‘061 y salud mental’, estuvo dividida en dos bloques. En el primero ellos, presentado por la doctora Guillén-Benítez, se concretaron los principales cometidos del Centro Coordinador de Urgencias y Emergencias, junto al protocolo aplicado en las demandas de atención más frecuentes relacionadas con enfermos de salud mental. En este sentido, la coordinadora del Centro trasladó a los asistentes la complejidad de la gestión de este tipo de servicios, en los que solo en las sedes de Málaga y Sevilla se atienden 500 mil demandas anuales. El proceso se inicia con la llamada telefónica del usuario, acto seguido se atiende a las demandas asistenciales con consejo sanitario, la asignación de un recurso o la derivación a otro dispositivo, y por último, se registran todos los datos en una base de datos informatizada.
Esa recopilación digital de casos es la que ha servido de base para el estudio realizado por el Grupo Andaluz de Investigación Psicosocial (GAP) dirigido por la doctora Moreno Küstner. En concreto, el GAP ha puesto el foco sobre los casos relacionados con salud mental, tanto en el número como en el perfil de estos usuarios. “En los últimos años, a nivel internacional, se ha producido un incremento de las demandas de urgencias y emergencias sanitarias, siendo las extrahospitalarias y relativas a salud mental las que lideran esa subida”, argumentó la investigadora. En concreto han extraído sus resultados del análisis de las más de 321 mil llamadas recibidas por el 061 y han trabajado en tres objetivos específicos: los usuarios hiperfrecuentadores, las demandas de tipo psiquiátrico y las de conducta suicida.
“La cuestión de los hiperfrecuentadores (con una media de edad de 71 años y en su mayoría mujeres) es bastante llamativa si tenemos en cuenta que hay pacientes que llaman hasta 468 veces al año, es decir, 39 veces al mes, lo que supone más de una vez al día durante todo el año”, describió Moreno Küstner. Pero si hablamos de las características propias de los hiperfrecuentadores por problemas de salud mental, la experta confirmó que el estudio revela que por lo general son más jóvenes, llaman menos y resuelven con más frecuencia su situación mediante consejo telefónico. “Creemos, añade la experta, que la hiperfrecuentación por temas de salud mental puede estar asociada, entre otras causas, a problemas psicosociales, dificultades socioeconómicas, falta de apoyo comunitario o social, o la falta de coordinación en los servicios sanitarios”.
Por último, en cuanto al suicidio, la doctora subrayó la cifra publicada recientemente por el Instituto Nacional de Estadística en la que, con 3910 fallecimientos, se ha constatado un ligero aumento (1% respecto al último año) de las muertes por este motivo. “Debemos tener presente que 11 personas se suicidan al día, convirtiéndose esta en la primera causa de muerte externa. Con nuestro trabajo hemos podido además profundizar en otras variables como las horquillas de edad más comunes, que en cuanto a casos de ideación y amenaza de suicidio estaría en la de 30 a 44 años, y en cuanto a episodios de suicidio consumado, en las de 45 a 59 y más de 75”.
En relación a lo anterior, la doctora advirtió que casi el 40% de los personas muertas por suicidio había sido atendido previamente en un servicio de urgencias. “Esto, sin duda, nos pone en la pista de que es crucial apostar por la prevención, por nuevas investigaciones en el ámbito de los sistemas de urgencias extrahospitalarias, por la formación en salud mental de los profesionales de urgencias y emergencias, e incluso plantear la presencia de especialistas en salud mental en dichos dispositivos asistenciales”, concluyó Moreno Küstner.
Beer for Science, impulsado desde el Vicerrectorado de Investigación y Transferencia a través del Servicio de Publicaciones y Divulgación Científica, consiste en una serie de charlas de investigación orientadas a todos los públicos con objetivo acercar la ciencia a la sociedad de una forma sencilla y amena. El programa de tertulias, que cuenta además con el apoyo de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, está integrado por otras cuatro citas. Todas ellas presentadas por expertos de distintas áreas del conocimiento y que versarán sobre educación, botánica, energía sostenible y la mujer en conflictos armados. Sin duda, una excelente oportunidad para acercarse a la ciencia fuera del laboratorio de la mano de quienes trabajan en ella a diario y en el ambiente distendido de una cervecería.
Próximas tertulias:
7 de abril | Plantas andaluzas vs plantas protegidas
Baltasar Cabezudo Artero y José García Sánchez, Departamento de Biología Vegetal
14 de abril | Narrativas de la escuela
Ignacio Rivas Flores, Departamento de Didáctica y Organización Escolar
21 de abril | Energía y sostenibilidad, ¿cómo se moverán los coches en el futuro?
María Olga Guerrero Pérez, Departamento de Ingeniería Química
19 de mayo | Mujeres y niñas en conflictos armados: no solo víctimas
Carolina Jiménez Sánchez, Área de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales