Escribano montesino (Emberiza cia)

O. Paseriformes, F. Emberizidae

Los escribanos son aves granívoras, con picos cortos y base ancha. El escribano montesinos es de pequeño tamaño (16 cm de longitud) y tiene una coloración brillante. El macho en verano tiene las alas de color negruzco, con las secundarias y grandes coberteras bordeadas de marrón y hombros de color gris pálido. El dorso es pardo claro con abundante barreado negro, obispillo marrón rojizo y larga cola de color negro con las rectrices laterales blancas. La cabeza y el pecho son de color gris ceniza con franjas negras en píleo, ojos y mejillas. La parte inferior es de un tono marrón tenue anaranjado. La hembra presenta un color gris más claro en el pecho y cabeza. Con frecuencia despliega la cola de una sacudida, cuando come en el suelo o corteja a las hembras, y entonces muestra el blanco de ésta. Habita zonas montañosas empinadas, pedregosas y elevaciones del terreno más o menos rocoso, con vegetación arbustiva o matorral espinoso. A veces en prados alpinos y claros con arboleda dispersa. Se alimenta de semillas, hierbas, insectos y otros invertebrados. Muestra un comportamiento discreto, más que tímido, y pasa fácilmente desapercibido. Es una especie que muestra una amplia distribución por las cadenas montañosas del Paleártico, desde la Península Ibérica y Magreb a China y Manchuria. En España ocupa todas las regiones montañosas o accidentadas peninsulares, así como extensas llanuras de la Meseta. A la población residente y reproductora se incorporan ejemplares invernantes procedentes del norte de Europa. No se considera amenazado en la actualidad.